miércoles, 28 de julio de 2010

DESCRÉDITO EN LA CULTURA DE GUANAJUATO

.
LA TRAICIÓN DE MARCO GAYTÁN ALBA AL MOVIMIENTO POR LA CULTURA


Siempre tuve la sospecha de que Marco Gaytán Alba se unió al Movimiento por la Cultura en Guanajuato para sacar provecho personal. He de señalar, también, que siempre me opuse a su pretensión de transformar dicha iniciativa ciudadana en una asociación civil, con la finalidad de “bajar recursos públicos”. Mi lucha era por influir y tratar de cambiar la política cultural, mientras que la suya era arrimarse adónde fuera con tal de conseguir un “hueso”. Marco Gaytán Alba, ahora, trabaja como gestor cultural en la Dirección Municipal de Cultura, bajo las órdenes de José María Hernández Vallejo.

El 10 de junio del presente año, cuando anuncié mi abandono de dicho Movimiento, ya Marco Gaytán, sin consultar a sus compañeros, decidió acercarse al senador Francisco Arroyo Vieyra, padrino político de José María Hernández Vallejo, para entregarle un dossier con documentos de nuestra lucha por la cultura. La intencionalidad de Marco Gaytán, en ese momento, me quedó clara (y más ahora con su contratación por la Dirección Municipal de Cultura), y por tal motivo, además de otros, decidí abandonar el Movimiento por la Cultura en Guanajuato, renegando públicamente, a través de un comunicado, de su coordinador: el susodicho Marco Gaytán.

Desde luego, no iba a dejar manchar mi nombre por alguien de tan dudosa talla moral como para aprovechar el esfuerzo de sus compañeros, y de todos aquéllos que nos apoyaron con su firma, para obtener un beneficio personal. Que yo sepa, hasta ahora no ha habido ninguna declaración del grupo que dirige el Movimiento por la Cultura en Guanajuato, respecto al proceder de su coordinador, pues no es válido, desde cualquier perspectiva, estar al frente de un movimiento ciudadano y, a la vez, trabajar en una dependencia pública de cultura (y más, repito, habiéndose valido de dicha iniciativa ciudadana para medrar en beneficio propio). ¿A qué intereses obedece ahora el Movimiento por la Cultura? ¿Dónde queda su independencia? ¿Dónde su honestidad?

Por otro lado, en muy mal lugar queda José María Hernández Vallejo con dicho “fichaje”, de alguien capaz de aprovecharse del esfuerzo de sus compañeros, de la traición, para obtener un puesto de trabajo. También, pareciese que el Director Municipal de Cultura, con este acto, quisiera agraviar a Juan Alcocer Flores, Director del Instituto Estatal de la Cultura, por la obvia acción opositora hacia dicha institución por parte de Marco Gaytán, como coordinador del Movimiento por la Cultura, y así enrarecer las relaciones en perjuicio del bien común.

Juan Alcocer Flores supo estar a la altura del compromiso y variar los objetivos de su política cultural, y por ello me siento orgulloso, de que nuestra lucha sirvió para despertar la conciencia de la comunidad y de nuestros dirigentes culturales, pero me entristece y avergüenza que algunos de mis antiguos compañeros de lucha naufraguen en su voluntad (e incluso con la connivencia), cuando permanecen silenciosos ante la traición de uno de los nuestros.

¿Para qué se sumaron a mi protesta? ¿Para conseguir “chamba”? Hay una gran diferencia en que te valoren por la calidad de tu trabajo, que valerte del trabajo de los demás para caer en la vergüenza.


Firmado: Pablo Paniagua, escritor y artista visual, a 27 de julio de 2010

.
.

1 comentario:

Armando Musical dijo...

Definitivamente estoy de acuerdo contigo; así como en otras ocasiones no lo he estado.